Estamos de acuerdo con que a todas nos gustaría tener el cuerpo perfecto, pero hey! eso no tiene por qué convertirse en una obsesión. Una cosa es estar saludable y otra muy diferente es mirarte al espejo cada 5 minutos a ver si es que tu abdomen se redujo un poco. Acá les dejo algunas claves para evitar esta obsesión que quizás a mucha atormenta día a día.

NO TENGAS TU BALANZA TAN CERCA

Está bien, ir midiendote en la cantidad que estás bajando y ver cómo estás progresando es algo necesario. Pero pesarte cada vez que vas al baño te aseguro que no te ayudará mucho. En mi caso cuando comencé en el running, pensaba que por vez que salía a correr iba a disminuir algo, no cometas este error, ya que los progresos y cambios vienen de a poco. ¡No te apresures!

¡ADÍOS A LOS ESPEJOS!

No me digan que no les encanta pasar por cualquier espejo y arreglarse el pelo, la chasquilla y tantas cosas. El espejo para mí, es un buen elemento pero quizás cuando estás en tu camino a la pérdida de peso no te ayude mucho mirarte todo el tiempo, ya que esto podría aumentar tus ganas por ver cambios rápidamente. Hace algún tiempo leí un artículo de una joven que cuando estaba en su camino por perder peso evitaba mirarse, al espejo y todos los espejos que pudo eliminar los eliminó. Luego de un tiempo volvió a incorporarlos.
A muchas podrá parecerles algo exagerado, pero les prometo que es una simple medida que aumentará su paciencia.

CUIDADO CON LOS REFERENTES

Pegar modelos en tu refrigerador, o tener a otra mujer como «ejemplo», es bueno hasta cierto punto. Puedes imitar sus buenos hábitos y técnicas de ejercicio, tal como lo haces probablemente con varios de nuestros artículos. Pero para que esto no se convierta en algo malo, tienes que considerar que tu cuerpo es muy distinto al de cualquier otra, además de que todas las mujeres acumulamos grasa en distintos lugares, tenemos diferentes estaturas y varias cosas distintas. Aquí lo importante es que trabajes para verte sana, y no «igual a».

Lo más importante para que no te obsesiones con el cuerpo perfecto, es que comiences a quererte a tí misma. Todas tenemos una cualidad que nos hace ser distintas y eso es lo que nos hace especiales. ¡Trabaja por y para tí!